Todo lo que debes saber sobre el flexitarianismo
¿Alguna vez has considerado convertirte en vegetariano? Si te preocupa tu alimentación, el cambio climático, la escasez de recursos naturales o la contaminación, quizá en alguna ocasión pasó por tu mente reducir tu consumo de carne roja u otros productos de origen animal, quizá hasta pensaste en renunciar a ellos, lo cual en ocasiones suele ser sumamente complicado.
Si te sientes identificado con el escenario anterior, quizá debas considerar el flexitarianismo como tu nuevo tipo de dieta, ya sea que lo apliques como una fase de transición hacia el vegetarianismo o como una alternativa para mejorar tu régimen alimenticio.
¿Qué es el flexitarianismo?
Este término apareció por primera vez en 1992, en un artículo escrito por la periodista Linda Anthony, en el cual describe un nuevo concepto culinario flexible para personas vegetarianas. Básicamente consiste en un “semi-vegetarianismo”, es decir, una dieta basada fundamentalmente en alimentos vegetales pero que ocasionalmente permite el consumo de productos animales en porciones pequeñas.
Debido a las pocas o nulas restricciones nutricionales que establece, diferentes especialistas han catalogado este régimen como una nutrición omnívora saludable, dentro de la cual se incluyen las dietas tradicionales que probablemente hemos practicado durante mucho tiempo.
Sin embargo, el objetivo del flexitarianismo, más que establecer parámetros inflexibles de alimentación, es reducir de manera gradual el consumo de productos de origen animal, para incrementar la ingesta de vegetales, frutas y cereales.
Si bien los flexitarianos no establecen frecuencia o cantidades permitidas, sí recomiendan una reducción en el consumo de carne de cerdo en 88%, de carne bovina en 73% y de arroz en un 49%; mientras que sugiere el aumento de semillas y nueces en 282%, legumbres en un 209% y de verduras en un 77%. Otra pauta que se aconseja respecto al consumo de carne, es que su ingesta por semana no supere dos raciones de 125 gramos.
Beneficios
Este tipo de dieta ofrece diferentes ventajas para quienes la adoptan, desde hábitos más saludables hasta una reducción en tu gasto semanal, incluso diversos especialistas señalan que una implementación masiva de este tipo de dieta, tendría un impacto positivo en el medio ambiente. Entre otros beneficios del flexitarianismo destacan:
- Reduce el riesgo de padecer cáncer, infartos y otras enfermedades cardiovasculares gracias a la reducción en el consumo de carne roja.
- Las dietas basadas en vegetales ayudan a bajar de peso y disminuir el índice de masa corporal.
- Aporta una mayor cantidad de fibra y reduce las grasas saturadas, favoreciendo mejores índices de colesterol y triglicéridos.
- Disminuye la producción de carne y productos de origen animal, reduciendo la contaminación y el daño ambiental.
- Permite una alimentación menos rigurosa a comparación de las dietas vegetarianas o veganas.
- Gracias a la flexibilidad en los planes alimentarios, tanto niños como adultos pueden adoptar este régimen.
Ahora que conoces más sobre el flexitarianismo, quizá te diste cuenta que ya formas parte de esta tendencia o probablemente lo estés considerando como una alternativa viable para mejorar tus hábitos alimenticios, de cualquier forma, recuerda consultar a un especialista para conocer la mejor forma de cuidar tu salud.
2 Comments
Joseph de la Paz
3 years agoAdemás de los beneficios para la salud de una alimentación con nula o escasa proteína y grasa animal, es importante recordar que mucha gente se hace flexitariana para combatir el cambio climático, ya que la ganadería es una de sus mayores causas.
Además, no olvidemos el sufrimiento de todos esos animales que dejarán de ser criados, maltratados y sacrificados debido a nuestros cambios de hábitos.
Podemos cambiar el mundo cambiando lo que comemos.
Vanessa Martínez
3 years agoCompletamente de acuerdo contigo, Joseph. Podemos comenzar con pequeños cambios en el día a día para crear un impacto global.
¡Qué gusto saber que nos lees!